Los que reciben y envían mails tienen un interés en común: evitar el spam. Por un lado, entrar a tu casilla y ver que tenés miles de mails en spam es molesto. Por otra parte, darte cuenta que los mails enviados a posibles clientes llegan a spam también lo es, hacerlo puede significar una gran pérdida de oportunidades.

¿Cómo evitarlo? Aprendiendo cómo funcionan los filtros de spam y el firewall, conocer qué medidas tener en cuenta para que lo enviado llegue a la bandeja de entrada.

En primer lugar, para evitar caer en spam, hay que cumplir ciertas leyes, requisitos que se adhieren al envío de correo electrónico comercial. Por ejemplo, no hay que usar asuntos o encabezados que engañen al destinatario, siempre hay que incluir la posibilidad de dar de baja la suscripción, lo enviado debe incluir, además, una dirección de correo físico, debe haber un equilibrio entre la cantidad de texto y la imagen que se utilizará, entre otras cuestiones.

En segundo lugar, existen filtros de spam que tienen en cuenta una serie de criterios específicos para juzgar si un correo es o no spam, funcionan mediante una puntuación que determina si la campaña pasará o no a través del filtro. Si la puntuación es mayor a cierto número, el correo será spam. Entre estos filtros se encuentran desde tu dirección IP, hasta la campaña de metadatos (los filtros se encargan de buscar si estás familiarizado o no con quien recibe el correo), pasando por el contenido, tanto lo que escribes como las imágenes que utilices deben ser cuidadosamente elegidas.

¿Qué tener en cuenta al diseñar una campaña de e-mail?

El diseño tiene que ser claro, contar con cierto equilibrio. Hay que ser consistente con lo que se envía, no cambiar demasiado en poco tiempo y debe asociarse con tu marca, mostrar una misma imagen en todos los medios, incluido tus mails. Y por último, pero no menos importante, ¡probar! Para saber qué es lo que mejor funciona, lo importante es poner a prueba todas las opciones que tenés y ver qué cambios serán los más útiles.

Cuestión de Firewall

Un Firewall de correo regula el correo electrónico basándose en un conjunto de reglas e indicadores de reputación filtrando antes de que lleguen a los filtros de spam propiamente dichos. Están preparados para bloquear los mensaje con características que el usuario haya determinado con ciertas etiquetas de antemano.

Consejos para campañas perfectas

La clave: tener el permiso del usuario. Aquel que recibe los mails debe querer recibirlos, por lo tanto, no asumas que podés enviarles mails para vender cuando quieras, concentrate en conseguir que se suscriban para que la información que envíes sea realmente de valor y produzca el efecto deseado.

Informá a tus suscriptores, que sepan lo que vas a enviar y la frecuencia, tenés que lograr que tus envíos se destaquen del resto, que se distingan. No pretendas ser parte de una lista de correos sin abrir, pensá en un contenido que realmente deseen recibir.

El tiempo es primordial. Es crucial saber en qué momento enviar tus campañas y, a la vez, no hay que esperar mucho tiempo antes de ponerte en contacto con tus suscriptores. La regularidad es importante para lograr la fidelidad con quienes esperan la información que brindás. Además, quienes son nuevos suscriptores, deberían recibir mensajes de inmediato, darles la bienvenida en el momento correcto.

Tus campañas de email marketing deben ser tan importantes como cualquier otras campañas, tal es así que el contenido y la imagen que presentes allí deben tener concordancia con todo lo demás, el reconocimiento de marca es importante para no pasar a ser spam en la casilla de tus suscriptores.

Buscar la manera de contar con las mejores campañas de email marketing, desde el momento de planearlas hasta la hora de pensar en su diseño, es cosa de todos los días. Probar y pensar en quién va a recibir tus mails, poniéndose en su lugar y cumpliendo las reglas establecidas, siguiendo todo esto conseguirás los resultados que tanto esperás. ¡Evitá ser parte de spam!